Primero el pueblo, luego los acuerdos; el agua es soberanía: Mario Vázquez
El legislador Mario Vázquez, pidió dictaminar con urgencia su iniciativa para proteger el acceso al agua en zonas urbanas y rurales.
El senador Mario Vázquez propuso elevar el agua a una prioridad constitucional para garantizar su uso exclusivo en beneficio del consumo humano y el desarrollo de las regiones más afectadas por la escasez.
Desde el Senado, llamó a proteger este recurso de intereses externos y exigió responsabilidad en el cumplimiento de acuerdos internacionales.
“En Chihuahua sabemos lo que vale cada gota de agua”, afirmó; por ello, desde abril presentó una iniciativa que busca blindar el agua almacenada en presas, priorizando su uso para consumo interno, especialmente en estados con crisis hídricas.
Advirtió que no se puede permitir que el agua embalsada se utilice para cumplir tratados internacionales sin una evaluación técnica, jurídica y social rigurosa. Sostuvo que el derecho humano al agua debe prevalecer frente a cualquier presión externa.
En este sentido, subrayó la necesidad de fortalecer la capacidad del Estado mexicano para responder con firmeza ante las exigencias derivadas del Tratado de Aguas de 1944, particularmente aquellas promovidas por el gobierno de Estados Unidos.
El legislador pidió dictaminar con urgencia su iniciativa para proteger el acceso al agua en zonas urbanas y rurales, aunque dijo que las lluvias recientes ayudaron a recuperar algunos niveles, recordó que la sequía prolongada ha vaciado mantos freáticos y generado un estrés hídrico severo.
La reforma propone declarar que el agua embalsada no forma parte del tratado bilateral, e impedir legalmente su extracción con fines internacionales sin la aprobación del Congreso, especialmente si afecta a usuarios mexicanos.
La iniciativa se estructura en cinco líneas de acción: Reafirmar que solo los escurrimientos naturales forman parte del Tratado de Aguas y fortalecer una comisión binacional hídrico-climática con participación de CILA, SEMARNAT, CONAGUA y gobiernos estatales.
Asimismo, blindar legalmente las presas nacionales frente a extracciones internacionales unilaterales, establecer un fondo de apoyo a productores y comunidades rurales en estados del norte del país y convocar al Senado a emitir un pronunciamiento firme a favor del agua como derecho humano y bien soberano.
El senador solicitó al Ejecutivo federal y a la Secretaría de Relaciones Exteriores entregar al gobierno estadounidense los informes actualizados sobre la sequía en el norte del país. Estos documentos deben ser considerados para evaluar los compromisos del Tratado de Aguas de 1944.
Recordó que los artículos 4° y 27 de la Constitución reconocen que los recursos naturales pertenecen al pueblo y alertó que las cuencas de los ríos Conchos y Bravo están en riesgo, y con ellas, regiones agrícolas fundamentales como los Distritos de Riego 005 y 009.