Mundo

Persiste tensión en Cachemira

La alegría por un alto el fuego entre India y Pakistán fue efímera en Cachemira. Decenas de miles huyeron de la parte controlada por India de la región en disputa la semana pasada en medio de intensos bombardeos y ataques con drones por parte de Pakistán. Sin embargo, a pesar de un cese del fuego anunciado el sábado, solo un puñado de familias regresó a sus hogares el domingo.

“Regresaremos hasta que prevalezca una calma completa. No se necesita mucho tiempo para que los dos países comiencen a pelear en la frontera”, expresó Basharat Ahmed, quien vive en el distrito de Poonch.

El alto el fuego tenía la intención de detener las hostilidades entre los vecinos con armas nucleares y desactivar la peor confrontación militar entre ellos en décadas. Pero solo unas horas después, cada lado acusó al otro de violar el acuerdo.

Funcionarios indios dijeron que los bombardeos paquistaníes desde el miércoles habían matado al menos a 23 personas y herido a muchas más. Los bombardeos también dañaron o destruyeron cientos de edificios residenciales.

El ataque
Un hombre y su familia en la parte de Cachemira controlada por India se habían refugiado en un colegio administrado por el gobierno en la ciudad de Baramulla. Cuando salieron temprano el domingo, soldados en un puesto de control los detuvieron, sin dar una razón, antes de que pudieran llegar a su hogar en el área de Uri en Poonch.

“Nuestra alegría por el alto el fuego simplemente se desvaneció”, señaló Bashir Ahmed. Él y su familia tuvieron que regresar al refugio en el colegio.