La democracia peligra cuando ciudadanía, candidatos y partidos están amenazados por inseguridad
El fenómeno que hoy nos ocupa, violencia y elecciones, no es un fenómeno derivado uno del otro. No es que necesariamente la violencia sea un fenómeno provocado por las elecciones, sino más bien que la violencia es un fenómeno social en donde las elecciones como parte de la recreación de la vida democrática, inevitablemente se circunscriben, pero la democracia estaría en peligro si las elecciones y sus actores centrales, ciudadanía, candidatos y partidos se ven amenazados por la violencia y la inseguridad, destacó el presidente consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, al participar en el foro “Recomendaciones para la seguridad de los candidatos y candidatas a los cargos de elección popular en las elecciones de Coahuila y el Estado de México 2023” organizado por el Colegio de México (Comex).
El titular del INE refirió al tomar la palabra que “el fenómeno de la violencia, si bien puede tener énfasis particulares en el ámbito electoral, es un fenómeno de mucho mayor alcance y tiene que ser enfrentado con una estrategia literalmente de Estado y no solamente centrada por los operadores electorales o los responsables de garantizar la seguridad exclusivamente durante los procesos electorales”.
Córdova Vianello destacó que “uno de los anhelos y promesas más ambiciosas de la apuesta por la democracia que México inició hace más de tres décadas fue la solución a una serie de problemas, incluidos entre ellos, problemas sociales, el de la inseguridad, las violencias y la construcción de la paz”.
Sin ocultar su preocupación por el momento que se vive en el país, con una galopante inseguridad, el presidente consejero del INE apuntó que “una de las paradojas de nuestra transición es que no hemos, con el tránsito a la democracia, atendido este grave problema, a pesar de que hemos alcanzado, desde hace varios años, una vida democrática plena en el ámbito electoral, en la que la alternancia, por ejemplo, es parte de la normalidad, algo cotidiano en nuestros ciclos políticos y en donde la única incertidumbre hoy que tenemos es la única que se vale en democracia”.
Asimismo, Lorenzo Córdova refirió que la paradoja es que aún no se ha logrado construir, como sociedad, todas las condiciones necesarias para la paz, para controlar la violencia criminal y la inseguridad, y en este contexto, la democracia peligra seriamente cuando las elecciones y sus actores centrales, la ciudadanía, las candidaturas y los partidos, se ven amenazados por la violencia y la inseguridad”.